Daño cerebral y visión

El daño cerebral en la corteza extraestriada  puede da lugar a diferentes alteraciones en la visión. Entre ellas vamos a tratar dos: la agnosia visual y la acromatopsia.

Agnosia visual: incapacidad para percibir o identificar estímulos visuales, es decir incapacidad para reconocer caras y objetos. Sin embargo, el sistema visual de  las personas que la padecen funciona correctamente, así como sus capacidades intelectuales. Hay dos tipos de agnosia visual, la agnosia perceptiva o agnosia visual del espacio (incapacidad para reconocer y diferenciar objetos), y la agnosia visual asociativa (no entienden la función o no saben el nombre de un objeto, sin embargo pueden percibirlo por otra modalidad sensorial o copiar imagenes)

Agnosia cerebral

Acromatopsia cerebral: incapacidad para percibir colores (ven como en blanco y negro), debido a una lesión del área V8 de la corteza extraestriada, si el daño es unilateral se perderá la visión al color sólo en la mitad del campo visual. Las personas que padecen esta alteración además de no poder percibir el color, tampoco pueden inmaginarlo, ni recordarlo.

Además de la acromatopsia cerebral existen otras, como la acromatopsia congénica (acromatopsia hereditaria) y la acromatopsia parcial (daltonismo)

La acromatopsia a abierto las puertas a la investigación sobre la percepción del color y puesto de manifiesto que la memora no se localiza en un lugar determinado.

Corteza visual

Areas de la corteza visual

   En la corteza visual se pueden diferenciar dos partes: la corteza visual primaria o corteza estriada (área V1) y la corteza visual de asociación o corteza extraestriada (áreas v2, v3, v4, v5, vp, v7 y v8).

   La corteza estriada se localiza en el lóbulo occipital del encéfalo y consta de seis capas y varias subcapas.  La corteza estriada de un hemisferio contiene un mapa del hemicampo visual contralateral.

   La corteza estriada se organiza en s 2500 módulos, cada uno de los cuales analizan diferentes características de una zona del campo visual. Los módulos están formados por  dos segmentos y cada uno de ellos rodea un blobs de CO. Cada mitad del módulo recibe información de uno de los ojos, pero la mayoría de neuronas responden a la información procedente de ambos ojos.

Las neuronas de los blobs son monoculares, sensibles al color y las  frecuencias bajas, mientras que las neuronas situadas entre los blobs son binoculares, sensibles a las  frecuencias altas, a la orientación, a la disparidad retiniana y al movimiento.

   La función de la corteza estriada es codificar  la orientación y movimiento, la frecuencia espacial, la disparidad retinaria y  el color de las imágenes.

   La corteza visual de asociación consta de varias regiones, cada una de las cuales contiene uno o más mapas independientes del campo visual y está especializada en características específicas de la información visual.

   Las distintas regiones se disponen jerárquicamente, analizan y transfieren la información a regiones superiores  para que realicen su posterior análisis. Los niveles superiores del sistema visual pueden actuar retroactivamente sobre la corteza estriada y modificar la actividad que allí está ocurriendo.

Se pueden diferenciar tres tipos de bandas: las finas, las pálidas y las gruesas, y dos tipos de vías: La vía dorsal y la vía ventral. La vía ventral  recibe imput de los tres tipos de capas del NGl, reconoce qué es un objeto y que color tiene y termina en la corteza temporal, mientras que la dorsal recibe imput magnocelular, localiza donde está el objeto, su velocidad y dirección, y termina en la corteza parietal posterior.